Encuentra aquí toda la información que necesitas conocer antes de vender tu casa: estimación del precio de venta (valor de mercado de la vivienda), gastos, documentación necesaria, trámites a realizar, preparación de la casa, visitas de compradores potenciales y más.
1. Determina el precio de venta de tu vivienda
Fijar el precio de tu casa es uno de los pasos básicos del proceso de venta y es primordial para determinar si puedes cumplir los objetivos que tienes en mente (ej.: comprar una casa nueva, obtener una ganancia, etc.).
Para estimarlo, es fundamental tener en cuenta la situación del mercado, los precios a los que se han vendido viviendas similares en la zona en los últimos meses, los precios a los que se ofrecen otras propiedades parecidas en los diversos portales de internet y todo esto, por supuesto, teniendo en cuenta la ubicación, la cercanía a los diferentes servicios, las calidades o acabados, la superficie de la propiedad, la antigüedad y el estado de conservación de la vivienda, si incluye o no garaje o trastero, servicios de la comunidad y, en algunos casos, las vistas o la orientación.
Es muy importante tener en mente que nuestra casa suele ser un bien muy preciado para nosotros al que solemos verle atributos y cualidades especiales. A menudo, esto nos hace darle un valor elevado de forma inconsciente pero debemos ser muy objetivos al comparar las características de nuestra propiedad con las de otras viviendas y ponernos en la piel del comprador.
También debemos tener muy claro que, aunque a veces nos parezca que al vender debemos recuperar el dinero que hemos invertido en nuestra casa, la realidad es que una reforma hecha a nuestro gusto es algo que hemos llevado a cabo para nuestro disfrute pero que no siempre ofrece un mayor valor al comprador y, por ello, no debemos aspirar a que nos la “reembolsen”. Lo mismo ocurre con diversos gastos como reparaciones, derramas o impuestos que son obligaciones a las que todos debemos hacer frente y que no aumentan el precio de venta de nuestra vivienda.
La mejor alternativa para determinar de forma fiable el precio de tu casa es acudir a un profesional, bien sea un tasador o tu agente inmobiliario. Recuerda que un precio acertado es clave para vender la propiedad en el tiempo y la forma óptimos.
2. Conoce los costes de la venta
A la hora de vender nuestra vivienda, debemos considerar los diversos gastos que nos corresponderá pagar. Éstos son los habituales:
- Impuesto Municipal sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, mejor conocido como plusvalía o plusvalía municipal
- Impuesto sobre las ganancias patrimoniales* que haya podido generar la venta (vía IRPF)
- Servicios inmobiliarios (en el caso de contratar a un agente)
- Gastos de cancelación de hipoteca y de gestoría, si fuera necesario
*Existen ventajas fiscales: por ejemplo la exención por IRPF, que puede ser total o parcial, si el beneficio obtenido se dedica a la compra de una vivienda habitual o a rehabilitar esa futura propiedad.
3. Descubre cuál es la documentación necesaria para vender
Aunque habitualmente dejamos esta tarea para el final, no es menos importante tener todos los documentos a mano. Así, aquellos que serán imprescindibles a la hora de llevar a cabo la operación son:
- DNI del/los propietario/s de la vivienda
- Escrituras originales de compraventa
- Nota simple del Registro de la Propiedad
- Certificado de eficiencia energética
- Certificado de estar al corriente en el pago de la comunidad de propietarios
- Certificado bancario de deuda o saldo pendiente, si existe un crédito hipotecario
- Último recibo del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI)
- Últimos recibos de los servicios (electricidad, gas, agua…)
Conoce en detalle estos documentos haciendo clic aquí.
En algunos casos se puede llegar a requerir alguna documentación adicional como por ejemplo el certificado de habitabilidad o la certificación de Inspección Técnica del Edificio (ITE).
En el caso de vender una propiedad heredada, es muy importante llevar a cabo la aceptación de la herencia ante un Notario, el pago del Impuesto Municipal sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana o plusvalía, y del Impuesto de Sucesiones, así como la inscripción de la propiedad en el Registro, para poseer la titularidad de la vivienda.
4. ¿Sabes cómo debes preparar tu casa?
Cuando hablamos de preparar una vivienda para la venta, nuestro foco está puesto en generar “amor a primera vista” porque sabemos que eso nos ayudará a venderla mucho más rápido y a conseguir una mejor negociación.
Las fotos resultarán más atractivas y atraerán a más clientes y las visitas serán mucho más efectivas.
Pero… ¿cómo lo conseguimos? Debemos despersonalizar la casa, y crear un ambiente depurado y armonioso, lo suficientemente neutro para que pueda encajar con los distintos gustos de los clientes, y hacer que logren imaginarse viviendo allí fácilmente.
La limpieza, la luminosidad y la sencillez son las claves de una buena presentación. Por supuesto, también debemos hacernos cargo de los desperfectos reparando elementos rotos como baldosas, cortinas, puertas o pomos, filtraciones, pintura desconchada, etc. y eliminando manchas y suciedad allí donde las haya.
Para esto también cuentas con el apoyo de tu agente inmobiliario quien sabrá orientarte sobre los puntos que puedes mejorar en tu hogar para sacarle más partido a sus características y hacerse cargo de una fotografía profesional que atraiga a los clientes.
5. Tenlo todo listo para las visitas
Has cumplido con todas las etapas preparatorias, tu casa está puesta a la venta y tienes una visita… ¿qué debes hacer?
Asegúrate de que la casa esté limpia y huela bien (airéala, elimina cualquier olor a mascota y a tabaco y evita perfumarla con aromas fuertes o en exceso).
Guarda tus zapatos y toda tu ropa bien doblada y organizada en los armarios. ¡Recuerda que probablemente el cliente querrá conocer la capacidad de almacenaje de los espacios!
Haz las camas cuidadosamente, organiza los productos y las toallas en los baños, despeja mesas y escritorios de objetos innecesarios. Lava platos, ollas y utensilios y guárdalos en su sitio, retira la mayor cantidad de fotos y elementos personales, y, por último, deshazte de las bolsas de basura, abre persianas y cortinas…
¡Estás list@ para recibir a tus clientes potenciales!
Algunos consejos adicionales
El tiempo que suele pasar antes de recibir tu primera oferta es muy variable, pues depende de una serie de factores diversos, como por ejemplo, la demanda que tiene la zona en la que está ubicada la vivienda, la oferta que hay en el mercado, el rango de precios en el que se ubica o el tipo de propiedad (por ejemplo, si es una vivienda de lujo o muy característica, tiene un precio alto y/o poca demanda), etc.
Ten paciencia y, sobre todo, apóyate en un profesional del sector inmobiliario que te oriente sobre las estrategias a seguir en cuanto a la promoción de la vivienda con los compradores potenciales correctos, mejoras que podrían hacerse a la propiedad para ayudar a venderla más rápido, ajustes de precios, entre otras acciones…
Si requieres información adicional acerca de trámites o necesitas ayuda con la venta de tu propiedad, no dudes en contactarnos rellenando el formulario que encontrarás aquí.